Fantasía para su masaje corporal - Ella

Se deleitó con la gloriosa sensación de anticipación al sacar su masajeador corporal del bolso. Le encantaba su tamaño perfecto para llevarlo a todas partes. Tan pequeño y potente, sonrió para sí misma al presionar el botón para encenderlo. Este era su momento privado y pretendía aprovecharlo al máximo. Había descubierto que estos encuentros secretos a solas ocupaban sus pensamientos durante todo el día. Le encantaba saber que podía alcanzar el orgasmo cuando quisiera. Se recostó en la silla y deslizó el masajeador por debajo de su falda. Al principio, simplemente disfrutó de la suave sensación de la suave silicona al frotarlo contra la parte interna del muslo. Esto era parte de su emoción: la anticipación de saber lo bien que se sentiría. Presionó el botón de encendido y sintió comenzar la excitante vibración. Se frotó el masajeador sobre las bragas, ya que no había razón para apresurarse. ¿Para qué apresurar su tiempo privado? Cuando ya no pudo esperar más, deslizó su masajeador corporal dentro de sus bragas y presionó el botón para aumentar las vibraciones. Sí, ahí estaba. El masajeador había conectado con su sensible clítoris y comenzaba a sentir un calor increíble extendiéndose por todo su cuerpo. Su corazón palpitó y pudo sentir su pulso acelerarse mientras frotaba suavemente su masajeador contra su capullo hinchado. Una vez más, presionó el botón de vibración. Ahhhh... Su cabeza se echó hacia atrás y un jadeo escapó de sus labios cuando una ola sensual de increíble placer la empujó más cerca de su clímax. Quería esperar y disfrutar de esta sensación todo lo posible. Y entonces, lentamente, el orgasmo brotó de sus profundidades, encogiendo los dedos de sus pies y provocando un emocionante escalofrío en su piel. Poco a poco volvió a sus sentidos y disfrutó de su sensación de completa relajación y satisfacción absoluta. Ahora sabía que podía enfrentar cualquier cosa que el día le deparara. Todo se trata de ella.